El estado de abandono que presentan muchas estaciones del subte porteño lleva como correlato una notable caída en la calidad del servicio. Las quejas de los usuarios se multiplican a la par del aumento en la tarifa.

Desde Emova señalan que tienen su energía puesta en la línea D que no funciona desde el 8 de enero y así se mantendrá hasta el 17 de marzo para “modernizar del sistema de señales”. Sin embargo, la más calamitosa es la línea E que mantiene vagones de la vieja generación (sin aire acondicionado) y más del 50% de sus escaleras mecánicas no funcionan. En la terminal Retiro de esta línea nunca funcionan todas las escaleras mecánicas.

En la estación Venezuela de la línea H más de una semana estuvo sin funcionar la escalera mecánica de Av. Jujuy mano impar. El ascensor, la escalera mecánica de Jujuy mano par directamente la cerraron y no funciona hace años. 

Este viernes la estación Carabobo de la Línea A tenía todas sus escaleras mecánicas y el ascensor sin funcionar. Hace días que sucede lo mismo con la escalera de la estación Perú que está en dirección a Plaza de Mayo.  La línea C, que une Retiro con Constitución, tiene a la estación Lavalle como una verdadera catacumba derruida y con filtraciones importantes de agua.