Retroceder en el tiempo parece ser una consigna del gobierno que es llevada hasta extremos sorprendentes por algunos de sus representantes. El diputado de la Libertad Avanza, Alberto Benegas Lynch, no solo se mostró contrario a mantener la obligatoriedad de la educación, en un reportaje radial afirmó que “la libertad también es que si no querés mandar a tu hijo al colegio porque lo necesitás en el taller, puedas hacerlo”.

Dándole contenido a la brutal afirmación Lynch se preguntó “¿Cómo va a ser el Estado el que decide sobre el chico?”, para agregar  “a mí no se me ocurre una cosa más invasiva”  Los dichos del diputado nacional de La Libertad Avanza merecieron críticas no solo de buena parte del arco político.  “Trabajar aleja a los chicos y las chicas de su derecho a aprender”, expresó Unicef  y la CGT, por su parte, rechazó los dichos del libertario, al advertir que “creer que el trabajo infantil es el objetivo que toda familia pretende para sus hijos, es de una primitiva mirada de patrón de estancia”.

La Ley 26.390 prohíbe el trabajo infantil en Argentina. La Constitución Nacional incorporó convenciones internacionales que protegen los derechos de los niños, incluyendo el derecho a no ser explotados y el derecho a la educación.