La jueza María Eugenia Capuchetti imputó a los dos detenidos “haber intentado dar muerte a Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, contando para ello con la planificación y acuerdo previo entre ambos”. Les achacó haber actuado “aprovechando el estado de indefensión” de la expresidenta “generado por la multitud”.

En la acusación se lee con claridad que se acusa a Sabag Montiel de haberle apuntado a Fernández de Kirchner “hacia su rostro con una pistola semiautomática de acción simple, calibre 32, marca Bersa, modelo Lusber 84 con la numeración ´25037´ en el lateral izquierdo del cañón accionando la cola del disparador en al menos una ocasión sin que se produzca el disparo pese a encontrarse la misma cargada con cinco cartuchos de bala del mismo calibre y resultar aptas para sus fines específicos”.

“El referido suceso tuvo planificación y acuerdo previo. Brenda Uliarte estaba presente en las inmediaciones del lugar al cual arribaron conjuntamente, habiéndose determinado que detentaban el arma de fuego secuestrada con sus municiones desde fecha anterior al hecho, cuanto menos desde el 5 de agosto de 2021”, según surge de la acusación que les leyeron a ambos.

Además se les imputó haber llevado consigo y/o tenido el arma de fuego “sin contar con la debida autorización legal, la cual receptaron previamente con la numeración parcialmente suprimida en la base de su empuñadura y a sabiendas de ello”.

También se los acusó por haber acopiado dos cajas de municiones, de cincuenta cartuchos calibre .32 cada una, con denominación MAGTECH conteniendo, que fueron secuestradas el 2 de septiembre, en uno de los allanamientos realizados.

Además se les imputó haber falsificado y/o haber participado en la falsificación de los certificados de discapacidad emitidos a su nombre por el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, mediante el aporte de sus datos filiatorios.