Resulta difícil entender la lógica planteada en sus discursos por la mayor parte del bloque de Juntos por el Cambio intentando justificar porqué optaron quedarse como negadores de un beneficio para trabajadores al no votar la quita de la cuarta categoría del impuesto a las ganancias. La determinación resquebrajó, puertas adentro, la alianza derechista.

El quiebre interno no solo fue dentro de JxC, también se lo observó en el interior del radicalismo. Hubo cuatro diputados de Evolución, Emiliano Yacobitti, Gabriela Brouwer, Danya Tavela y Marcela Antola, que desoyeron el acuerdo previo y bajaron al recinto para dar quorum. Otros siete, también de la UCR, prefirieron no votar, entre ellos Facundo Manes.

La intervención de Alejandro Cacace para fijar su oposición al proyecto se basó, como la de muchos del interbloque, en definirla como de oportunismo electoral. Semejante flojedad argumentativa quedó en un segundo plano tras la intervención del histriónico Martín Tetaz quien explicó que pese a su buen sueldo como diputado se encuentra entre los beneficiados por la quita del IVA. Una falsedad que quedó expuesta en forma grotesca minutos más tarde cuando su par entrerriano Tomás Ledesma (Frente de Todos), comentó que ingresó a la página de la AFIP con el CUIT de Tetaz para saber su condición y el sitio le respondió “sin beneficio”. Desnudar la mentira mereció el aplauso y sonrisas irónicas de buena parte del recinto.