La Cámara de Diputados aprobó y envió al Senado el proyecto de ley que prorroga por 50 años las asignaciones específicas destinadas al sostenimiento de actividades como las que se llevan a cabo en bibliotecas populares, el cine, la música y el teatro, y cuyo plazo actual expira el próximo 31 de diciembre, de acuerdo a lo resuelto durante el anterior gobierno de Cambiemos.

La iniciativa sumó -132 votos a favor, del Frente de Todos, el interbloque Federal, Provincias Unidas y la Izquierda; 5 en contra, de legisladores libertarios; y 92 abstenciones, de la mayoría de los integrantes de Juntos por el Cambio que esgrimieron argumentos de poca consistencia. Hernán Lombardi, del PRO, cuestionó que “el hecho de que el proyecto no haya sido girado a la comisión de Cultura (que él preside), habla del concepto economicista que (el oficialismo) le da a la iniciativa. Son recovecos de la mecánica parlamentaria que tenemos que mejorar, en un severo error de procedimiento”.

Tras más de cuatro horas de debate finalmente se impuso el texto impulsado por el oficialismo, pese al intento de algunos sectores, como el radicalismo, para que se aceptara bajar el plazo de la prórroga para poder acompañar con el voto a favor.

El miembro informante del proyecto y presidente de la comisión de Comunicaciones, Pablo Carro (Frente de Todos), señaló: “Lo que estamos discutiendo hoy acá es cómo hacemos para financiar y promover nuestra cultura y al conjunto de instituciones que forman el entramado de nuestra cultura”.

“El hecho de que seamos un país pobre no implica que no tengamos que invertir en cultura; lo del plazo lo veo como una discusión técnica muy fina y con respecto al tema de la burocracia, el argumento es absurdo, porque cada peso que se pone se multiplica”, continuó.

Por último, sobre los cuestionamientos previos de algunos bloques opositores, remató: “Con la guita de la cultura no le vamos a pagar al Fondo Monetario Internacional; así como con la plata de los trabajadores, no; con la plata de la cultura, no”, expresó.