Tras arribar esta mañana del viaje que lo mantuvo en Estados Unidos todo el fin de semana, Javier Milei permaneció en Olivos el resto de la jornada poniendo la mira en la agenda de temas que distibuye entre sus colaboradores. Bajo esta escenografía surge la pregunta: ¿que beneficios traen al país estos encuentros que son más privados que oficiales?, ¿Habrá inversiones?.

En siete meses de gestión el presidente lleva realizados 12 viajes al exterior (uno nuevo, a París, esta previsto antes de fin de mes), 5 de ellos a Estados Unidos. En su entorno se muestran exageradamente satisfechos por el resultado que dejó la presencia del presidente en la conferencia Sun Valley. Repasan una y otra vez la muy acopata lista de empoderados magnates de la economía mundial con los que Milei tuvo reuniones. Se entusiasman relatando que “se están programando viajes de varios de ellos a la Argentina”, y están seguros que será el paso previo a anuncio de inversiones.

El propio Milei alienta ese resultado. “Las grandes cabezas de las compañías están dispuestos a invertir, ya están hablando de cantidades de dinero”, aseguró el propio Milei en un reportaje radial realizado esta madrugada. Fue en el mismo que expresó su deseo que el seleccionado campeón de América visite la Casa Rosada en su regreso de EEUU. Ante la segura negativa y para evitar una interpretación de rechazo al presidente, sus voceros rápidamente salieron a señalar que “no hubo una invitación formal, solo una expresión de deso del propio presidente”.