Como anticipo de la masividad que tendrá la marcha del próximo martes en defensa de la educación pública y las universidades, este jueves hubo abrazos al Hospital de Clínicas y también al Roffo, especializado en oncología. En el primero de ellos abarcó más de dos cuadras de la Avenida Córdoba que estuvo cortada al tránsito y desbordada de gente. “El hospital está sobrecargado de pacientes que llegan por haber renunciado a las prepagas, y hay falta de insumos básicos para atender u operar a la gente que lo necesita”, señaló una médica del histórico nosocomio.

El director del Cínicas, Marcelo Melo, expresó que “poner a un hospital en modo ahorro es una agresión tremenda” . Ampliando sus consideraciones Melo resaltó que “el Hospital, para funcionar, necesita recursos, presupuesto. El presupuesto es para la compra de los insumos, medicamentos, los descartables, medicamentos de alto valor, el mantenimiento de la aparatología, el seguro de los aparatos, que es muy caro. Si no tenemos esos recursos porque no existe el presupuesto, no podemos enfrentar ninguna licitación”.

La modalidad de un abrazo a las instituciones afectadas por el brutal ajuste que está aplicando el gobierno nacional contra todos los organismos públicos se va extendiendo cada vez más. Ayer se vio el mismo escenario en el Conicet, en estos días se repetirá en varios hospitales y centros universitarios.