El presidente suele perforar su propio recorrido en sus discursos marcando una tendencia cada vez más marcada hacia un país que involuciona cultural e intelectualmente. Ahora, resaltó que “la universidad se convirtió en un obstáculo para la movilidad social”, asegurando livianamente que la Universidad gratuita “se convierte en un subsidio de los pobres a los ricos”.

Definiciones del primer mandatario que van a contramano de la realidad. De acuerdo a un informe dado por en Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), el 48,5% de los estudiantes universitarios vive en hogares pobres, y el 68% de ingresantes a la universidad pública son primera generación de universitarios.

En un mensaje arcaico dado desde el Centro Cultural Kirchner el primer mandatario reinstaló consignas de un enorme retraso en la evolución social de nuestro país. Temas que dejaron de ser motivo de debate 70 años atrás, como la educación pública y gratuita. Sin mayores datos que lo corroboren aseguró que vivimos “en un país donde la mayoría de los niños son pobres y no saben leer”.

Milei, ignorando el reconocimiento internacional que tiene la calidad educativa de la UBA, criticó a los defensores del modelo de educación pública resaltando que “siguen intentando con el mismo modelo que fracasó hace más de 100 años, algo a lo que nosotros venimos a ponerle fin y a poner de pie a la nación.” 

Reconociéndose defensor de la argentina colonial del siglo XIX Milei se colocó dentro de una línea histórica afirmando que “hoy, 156 años después de la asunción presidencial, quiero ratificar que Sarmiento sigue siendo una de nuestras grandes guías, aunque les pese a Julio Argentino Roca, a Urquiza, a Mitre, a Avellaneda, a Pellegrini y, sobre todo, a Juan Bautista Alberdi.”