El déficit que dejó la sequía en nuestro país representa 14.500 millones de dólares que no ingresarán al Banco Central. Así lo resaltó este jueves el Ministro de Economía, Sergio Massa, ante empresarios en el evento energético de IDEA, que se desarrolla en Neuquén.

De todas formas y pese a este diagnóstico, Massa se mostró optimista para el futuro argentino destacando que el país en pocos años dejará de ser un histórico importador de energía para colocarse como exportador de un insumo que reclama el mundo. “El día que inauguremos el gasoducto (Néstor Kirchner) vamos a poner en marcha la licitación de la segunda etapa con la particularidad que lo haremos invitando a invertir al sector privado”, adelantó el ministro.

Massa también se refirió a las obras de infraestructuras necesarias para el transporte de esa energía que tiene el subsuelo de la geografía argentina. En ese contexto respaldó la idea que el gas es energía de transición, por lo tanto es necesario construir infraestructura capaz de trasladar tanto gas como hidrógeno apuntándolo como la fuente de energía renovable que abastecerá a un mundo necesitado de frenar el embate de la contaminación. En todo caso, remarcó, el desafío es “saber si tenemos la capacidad de desarrollar esas energías”.

El ministro también afirmó, “podemos producir un cambio absoluto en la economía argentina” a partir de lo que representa Vaca Muerta que será la segunda usina de ingresos de divisas en el país.