El ex presidente Macri se despachó con definiciones varias en una entrevista en TN. Entre otras cosas defendió las políticas del Fondo Monetario Internacional asegurando que “no es gente mala” (sic) asegurando que esa definición es una “narrativa destructiva” construida en su contra.
El organismo que le aprobó a Macri el crédito más grande de su historia a sola firma, por 57 mil millones de dólares, fue motivo de una catarata de elogios desplegados a boca de jarro por el ex mandatario. Lo hizo bajo una descripción de rigurosa ingenuidad asegurando que “es mentira que el FMI es gente mala que quiere perjudicar a la Argentina”, insistiendo que solo exigen no tener déficit fiscal como sucede en Paraguay o Chile. Piden “que seamos normales” y “equilibremos las cuentas”.
Macri se refirió al FMI como si no fuera parte de una estructura de poder al servicio de la estrategia geopolítica de Estados Unidos. Insistió con definir que “el Fondo presta a una tasa menor que un banco común porque no lo hace para hacer negocios sino ayudar”. Definición cercana a una tomadura de pelo para habitantes de un país que sufre los padecimientos de un organismo que solo pide acomodar la economía local en línea con intereses ajenos. Está harto demostrado que el FMI presta dinero con la sola intención de timonear la economía de los países endeudados.
Párrafo aparte fue el comentario de Macri sobre un pedido realizado por su hija. “Tres veces , tres veces ya , Antonia que tiene 11 años me dijo , yo me quiero ir a terminar de estudiar afuera papá . La saqué cagando ! Le dije : Yo me muero si vos te vas , te quedas conmigo”