El próximo domingo más ocho millones de cubanos mayores de 16 años están habilitados para votar, por si o no, a la reforma de la Carta Magna que desde hace meses se debate en el país caribeño proponiendo más de 750 cambios, ampliando derechos y reafirmando conquistas.

El parlamento cubano la aprobó en noviembre, pero para entrar en vigencia debe ser ratificada por el voto popular este 24 de febrero. La actual Carta Magna, aprobada en 1976 y modificada de manera parcial en 1992 y 2002. La que se pone a conseideración de los cubanos este domingo ratifica el sistema socialista y al Partido Comunista como organización única. También abre la liberalización socioeconómica a partir de la aprobación de la propiedad privada; ratifica un Estado laico, fortalece la protección a la mujer e introduce la figura de Primer Ministro.