Las ventas minoristas, medidas en cantidades, cayeron 34,8% en junio frente a igual mes de 2019, medidas en cantidades. Así lo señala un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa dado a conocer este domingo en base a 1100 negocios de todo el país relevados entre el 1 de julio y el sábado 4 del mismo mes, por un equipo de 30 encuestadores localizados en las capitales del país, GBA y CABA.

Las estadísticas recopiladas incluyen tanto modalidad online como en locales físicos. Con mayor cantidad de comercios abiertos, el declive fue menor que en mayo. La baja en la región AMBA llegó al 49,3% mientras que en el resto del país a 20,3%. Sin considerar las actividades esenciales (Alimentos y bebidas, Farmacias y Ferreterías), la baja se ubica en 43,1%.

El informe destaca que tras tres meses y medio de cuarentena, algunas ciudades del interior del país con casos controlados de Covid-19, comenzaron a activar sus actividades comerciales, aunque lentamente.

La mayor retracción en las ventas se sintió en el AMBA, donde el expendio minorista descendió 49,3% afectado por los controles más estrictos, que generaron menor cantidad de locales abiertos y menos circulación de gente comprando. Al ser la zona de mayor concentración de casos de coronavirus, la actividad comercial sigue siendo muy baja, sobre todo, en los rubros no esenciales. Así, si se miden las ventas solo en ese segmento, la caída en el AMBA fue de 60,7%. En el resto del país, en cambio, las ventas declinaron un 20,3%.

Todos los rubros medidos declinaron frente al menor consumo generalizado que provoca la caída en los ingresos, la menor circulación de gente en las calles, y la incertidumbre. En los primeros seis meses del año, el comercio minorista pyme acumula así un derrumbe anual de 32,5% frente a iguales meses del 2019.