La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) quedó habilitada desde este viernes para notificar a los 12 mil contribuyentes que tienen un patrimonio superior a los $200 millones y están obligados a pagar lo que establece la ley de Aporte Solidario y Extraordinario para ayudar a morigerar los efectos de la Pandemia que fue votada en diciembre por el Congreso y reglamentada por el presidente Alberto Fernández.

El gobierno estima que recaudará 300 mil millones de pesos cuyo destino está establecido en la ley. Un 25% irá a la exploración, desarrollo y producción de gas natural; otro 20% a adquirir equipamientos de salud para enfrentar la pandemia; un 20% a apoyar a empresas Pymes; un 20% para financiar el relanzamiento de las becas Progresar creadas para apoyar a jóvenes estudiantes, mientras que el 15% restante se utilizará para la urbanización de barrios populares mediante cooperativas organizadas por los vecinos de cada barrio.

La norma establece que la tasa a cobrar se irá elevando según el rango de fortuna que se haya declarado: será del 2,25% para quienes se encuentren entre los $300 y los $400 millones, del 2,50% para aquellos que tengan entre $400 y $600 millones, y del 2,75%, para aquellos patrimonios entre $600 y $800 millones.

El aporte subirá hasta el 3% en el caso de las fortunas entre los $800 y $1.500 millones y se extenderá hasta el 3,25% para quienes tengan entre $1.500 y 3.000 millones.