En conferencia de prensa realizada en La Plata este lunes el gobernador Axel Kicillof aseguró que si el gobierno nacional, tal como viene anunciando, decide vender el paquete accionario de Aerolíneas Argentinas, la provincia de Buenos Aires está dispuesta a participar en su compra recordando que el año pasado la empresa no necesitó recibir asistencia económica del gobierno nacional.

El mandatario provincial comentó «estamos ante el intento de otro saqueo, una estafa. La quieren vender parea apropiarse de sus aviones y rutas aéreas», remarcando que hay 21 destinos en el país donde solo viaja Aerolíneas Argentinas.

Kicillof comentó que está manteniendo reuniones con los trabajadores, con el sector empresario turístico y con otros gobernadores interesados en el destino de Aerolíneas. En ese sentido comentó que realizaron cálculos de los beneficios que le traerá a la administración bonaerense la continuidad del servicio atendiendo que su cierre representaría una pérdida de USD 2.600 millones de dólares para la provincia.

«No estamos en condiciones, como país, de aceptar otro vaciamiento de nuestra línea de bandera» aseguró el gobernador resaltando que la provincia no va a permitir otro desguace de Aerolínea, remarcando que su privatización es una decisión «trágica», recordando lo que sucedió cuando fue privatizada y desguazada por sus compradores pasándosela de mano en mano hasta su desguace.

Suponiendo que la privatización de Aerolíneas Argentinas será uno de los temas que impulsara el gobierno en el parlamento en diciembre, Kicillof puso atención en que para en esas extraordinarias no incluyó debatir el presupuesto nacional. «Si no hay presupuesto el gobierno tiene absoluta arbitrariedad para digitar los gastos», definiendo esta acción como una «estafa» al remarcar la peligrosidad que representa que el gobierno nacional no tenga aprobado como serán sus gastos en 2025.

No tener presupuesto impide conocer cuales son los recursos que aplicará el gobierno nacional para las provincias, «es tremendamente grave esto, no pasó nunca. Milei puede hacer lo que se le antoja…no tiene nada que ver con la democracia»