Acaso lo más preocupante que puede resaltarse de lo que dejó la elección de este domingo en la Ciudad de Buenos Aires ha sido la muy baja participación de los empadronados. Fue apenas el 53% quienes lograron introducir su voto en la urna, nunca en la Ciudad se llegó a un porcentaje tan escaso. En algunas de las 15 comunas el promedio fue mucho más bajo aún como en la 8 donde solo votó el 46%.

Trazando una comparación con la elección de dos años atrás, cuando la participación del electorado fue del 76,7%, nos da una preocupante postal del poco interés que ha generado el acto electoral. Hubo elecciones que tuvieron picos que superaron el 80%, como en 1993. La más baja de los últimos años fue la de 2003, con un 69,7%.

El porcentaje tan bajo de participación es un extraordinario llamado de atención que golpea el sentido democrático de una elección donde hubo 17 listas, es decir candidatos y propuestas bien diferentes.