Por primera vez en la historia, la Cámara de Diputados de la Nación realizó su primera sesión virtual en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por el Gobierno Nacional por la pandemia del coronavirus.

La sesión especial comenzó minutos después de las 18, con quórum de 240 diputados de forma presencial y remota. En el inicio de la sesión, el plenario aprobó por 248 votos afirmativos contra 2 negativos el Protocolo de Funcionamiento Parlamentario Remoto que establece pautas de funcionamiento de sesiones telemáticas, adecuando a esa modalidad las reglas establecidas en el Reglamento de la Cámara de Diputados.

En cuanto a los proyectos tratados, se aprobó por unanimidad con 252 votos afirmativos un proyecto de exención del pago de Impuesto a las Ganancias destinado a los profesionales de la salud pública y privada, al personal de las fuerzas armadas, las fuerzas de seguridad, la actividad migratoria, la actividad aduanera y los bomberos, entre otras actividades esenciales.

El texto anula por un periodo de seis meses, desde el 1 de marzo hasta el 30 de septiembre, los efectos del Impuesto a las Ganancias para estos sectores. Además, establece una pensión graciable vitalicia, equivalente a dos jubilaciones mínimas, para los familiares de dichos trabajadores que hayan perdido la vida como consecuencia de haber contraído coronavirus durante su ejercicio profesional.

Al respecto, el diputado Carlos Heller, del Frente de Todos, explicó que el proyecto “genera un reconocimiento a un conjunto de trabajadores y trabajadoras que están fuertemente vinculados en la pandemia y la emergencia sanitaria”.

Desde Juntos por el Cambio, el diputado Luciano Laspina reclamó que “el contexto exige sostener al sector privado y productivo”. “La crisis económico-sanitaria que vivimos es gravísima. El objetivo de las políticas públicas debe ser minimizar el hambre y minimizar las quiebras empresarias. Tenemos que llegar con medidas al sector privado”, dijo Laspina.

En tanto, el diputado Andrés Zottos, en representación del Interbloque Federal, destacó que “este proyecto es un humilde reconocimiento de todos los argentinos al sector de la salud”.

Nicolás Del Caño, en nombre del Frente de Izquierda y los Trabajadores, calificó al proyecto como “una gota en el océano” y reclamó que se incluyan a “todos los sectores que hayan ido a trabajar” durante la cuarentena. Además, pidió dar el debate sobre el impuesto para las grandes fortunas.

Asimismo, también por unanimidad, se aprobó un Programa de Protección al personal de salud ante la pandemia de COVID-19 por 251 votos afirmativos.

Entre sus objetivos, el proyecto busca garantizar todas las normas de bioseguridad y los materiales de protección para prevenir el contagio del coronavirus entre el personal de salud. El Programa alcanza al personal médico, de enfermería, de dirección y administración, de limpieza, entre otros.

Como autor de la iniciativa, el diputado Eduardo “Bali” Bucca, titular del interbloque Federal, consideró que se trata de “una herramienta para cuidar a quienes nos cuidan”. “Estamos a tiempo para blindar la salud de quienes son protagonistas en esta situación tan compleja”, resumió Bucca, quien pidió que la ley lleve el nombre de Silvio Cufré, el primer trabajador de salud que falleció a causa del coronavirus.

Mientras que el diputado Pablo Yedlin, del Frente de Todos, remarcó que este proyecto “valida la importancia de un Ministerio de Salud que permite que los protocolos, la bioseguridad y la compra de equipamiento se distribuya en forma en el país”.

Desde el bloque PRO, la diputada Carmen Polledo recordó el crecimiento de la cifra de contagios entre el personal de salud y ponderó el “coraje” de dichos trabajadores. “Queremos apoyar al personal de salud desde el Congreso, para que puedan desempeñarse en las mejores condiciones”, dijo.

A la hora de los cierres de bloque, el diputado José Luis Ramón, de Unidad y Equidad Federal, se refirió a la sesión como “un hecho político de suma importancia, porque significa que aquellos que representamos al pueblo estamos haciendo nuestro trabajo”.

Del mismo modo, el diputado Jorge Sarghini, de Consenso Federal, consideró que “en las leyes que votamos hoy hay justicia, solidaridad y reconocimiento: se ha hecho con mucho diálogo y consenso”.

El presidente del interbloque Juntos por el Cambio, Mario Negri, ponderó la reunión mixta, pero advirtió que “los colegas puedan volver a sentarse en el recinto”.

“Tenemos una responsabilidad colectiva. Frente a un hecho de esta naturaleza no puede haber especulación política. Hay que hacer funcionar las instituciones, que sean contrapeso en la crisis. Y que tengamos el Congreso despacio en plenitud”, sintetizó.

El titular del bloque Frente de Todos, Máximo Kirchner, defendió el aislamiento social, preventivo y obligatorio, y las medidas del Poder Ejecutivo frente a la pandemia. “Tenemos que poner en el centro de la acción del estado a la gente de carne y hueso, que la está pasando mal. Es cosa de todos y todas salir adelante en esto”, dijo Kirchner.

“Quiero agradecer a la oposición que siempre que se los convocó estuvo. Y sepan que cuentan con nosotros para aguantar si sienten presión para cuidar la vida de la gente”, cerró.

Al comienzo de la sesión, se realizó la jura de tres nuevos diputados y diputada. Asumieron su banca Claudia Bernazza (Frente de Todos) en reemplazo de Daniel Scioli; Lisandro Bormioli (Frente de Todos) en lugar de Andrés Larroque; y José Luis Patiño (PRO), quien ocupará el lugar de Elisa Carrió. También se aceptó la renuncia de Florencia Romano, prosecretaria Administrativa de la Cámara.