¿Habrá respuesta del gobierno al reclamo planteado por más de un millón de personas que ayer se movilizaron en todo el país en defensa de la educación pública y las universidades?. La marcha en la Ciudad de Buenos Aires fue la más numerosa, pero el reclamo se sintió en buena parte de la geografía nacional con marchas multitudinarias en ciudades como Mar del Plata, Córdoba, Gualeguaychú, Bariloche, Rosario o San Luis.

La primera respuesta a la pregunta inicial de estas líneas se puede leer en un mensaje lanzado en redes por el propio presidente Milei mostrando un dibujo del rostro de un león tomando una infusión en una taza que lleva la inscripción “lágrimas de zurdos”. Esa fue la primera reacción del primer mandatario en su lectura de la movilización. Una síntesis de enorme pobreza intelectual que muestra una preocupante carga de limitaciones del presidente para interpretar la realidad. Es también un sello identificatorio del fundamentalismo de mercado que identifica al núcleo duro que rodea a Milei.

Uno de los referentes más influyentes de ese grupo cercano al presidente es Santiago Caputo. El lunes se mostró en el patio de las Palmera de Casa Rosada donde es frecuente la presencia de periodistas acreditados. Con varios de ellos mantuvo un extenso diálogo informal. En determinado momento se le preguntó si hubo alguna autocrítica del presidente por el brutal comentario que realizó en Bariloche ante empresarios que participaban del Foro del Llao LLao, llamando “héroes” a quienes fugan divisas. Era de esperar una respuesta de Caputo ligada al temperamento de Milei y sus formas de comunicar. Nada de eso. Caputo reafirmó el calificativo del presidente. Justificó el delito que representa la fuga de divisas argumentando que se trata de una reacción ante la opresión que representa el Estado. Reflexión del asesor presidencial reafirmando el fundamentalismo ideológico que domina el pensamiento del gobierno.

Caputo, que no tiene firma pero si mucho peso ideológico en el gobierno, trabaja en sintonía con Karina Milei. Monitorean diariamente el funcionamiento de distintas áreas. En los últimos días han puesto una mirada crítica sobre la cartera que conduce Sandra Petovello. En buena parte la acusan de haber generado las condiciones para fortalecer la convocatoria de la marcha de ayer.

La presión realizada sobre Petovello viene de arrastre y terminó generando la salida de dos de sus funcionarios. Se trata de Maximiliano Keczeli, quien se desempeñaba como secretario de Coordinación Legal y administrativo de la Cartera y Marcelo Hita, titular del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales. Ambas dimisiones fueron argumentadas bajo el rótulo de cuestiones personales.