El secretario de Seguridad porteño, Diego Kravetz, se despachó con un insólito comentario este martes en un reportaje radial. Aseguró que  él está en contra que los vecinos ofrezcan comida a las personas en situación de calle.

Puntualizó que ese tipo de acciones solidarias con las personas más desprotegidas de nuestra sociedad solo generan lo que definió como «un circuito no virtuoso» que ayuda a mantener a esos individuos en el lugar que se encuentran. «Si lo ayudás a que esté cómodo en la marginalidad, se va a quedar estancado», aseguró el funcionario potenciando la tendencia deshumanizada que se observa en estos tiempos.

Según datos oficiales en las calles porteñas viven más de 4.500 personas, incluyendo muchos menores. Datos extraoficiales de organizaciones que atienden las necesidades de este sector desposeído de bienes y servicios, aseguran que la cifra real duplica la que señala el gobierno porteño.