La sombra del quiebre interno en Juntos por el Cambio ronda cerca. Elisa Carrió se desbocó en los últimos días con viejas denuncias que puso nuevamente en el tapete de los medios públicos (nunca lo hizo ante los tribunales de justicia), y provocó reacciones y acciones dentro del espacio que comparte con radicales y la extrema derecha del PRO.
Patricia Bullrich se subió rápidamente a contestarle con la intención de forzar al extremo la discusión. Hace tiempo que, puertas adentro, la ex ministra de seguridad opina que es hora de empujar a Carrió fuera de la alianza. Acaso pensando que es un obstáculo para delinear nuevas estrategias y alianzas en los tiempos prelectorales que ya está entre nosotros.
Larreta, mucho más debitado en su imagen como presidenciable, venía teniendo en Carrio una aliada para confrontar con el ala dura del PRO. Sus últimas críticas, aunque leves, a la fundadora de la Coalición Cívica por sus declaraciones recientes fueron lapidarias para esa relación. Las hizo en medio del pedido de una sesión especial que hicieron 4 bloques opositores a Larreta en la Legislatura Porteña para tratar la vergonzosa extensión por más de dos décadas de las empresas concesionarias del acarreo de autos. La oposición reúne a 28 legisladores, le faltan 3 para tener la mayoría simple que habilitaría la sesión especial. Los diputados de la Coalición Cívica están dentro del bloque oficialista (Vamos Juntos), sin embargo anunciaron que en esta oportunidad se sumarían a la oposición.
Así lo adelantó Facundo Del Gaiso al adelantar desde su cuenta en Twitter: “La Coalición Cívica pedirá que se suspenda el servicio de acarreo y que la Ciudad se haga cargo del servicio hasta que se adjudique la nueva licitación”. Pocas horas después de este mensaje Larreta anunció el fin de las concesiones para las grúas privadas y la toma de ese servicio en manos de la administración porteña.
No fue el único mensaje marcando el alejamiento del espacio de Carrió de Juntos por el Cambio. La diputada nacional de la Coalición Cívica Mónica Frade reveló que las denuncias de corrupción en la empresa de aguas Aysa durante el gobierno de Cambiemos son “sostenidas y fundadas” y dijo que ese espacio está “siempre está atento” a los casos de corrupción que se producen en todos los ámbitos.
En declaraciones este martes a FM Futurock, Frade consideró que “hay que investigar” la situación de Aysa cuando estuvo bajo la órbita del entonces ministro de Interior, Rogelio Frigerio, ya había denunciado hechos de corrupción en esa empresa por parte de funcionarios ligados al actual diputado nacional.
La tirante relación del espacio de Carrió con el resto de las fuerzas que componen la alianza que gobernó el país entre 2014 y 2019 tomó una inesperada aceleración que debilita a algunos, Larreta en primer término, y fortalece a quienes la quieren ver afuera porque ya no hay más posibilidades de sostener sus planteos.