“Lo primero que hice cuando lo descubrimos es resolver que no se pagaba, e instruir a la sección de jurídicos que analice cómo se había hecho todo eso. Ahora, están preparando ese informe para ver si hay alguna medida que tomar, obviamente no respecto del club sino del director a cargo.” Es la explicación que dio la nueva titular de AySA, Malena Galmarini, al periodista de Página 12 que la entrevistó tras conocer la denuncia pública inicialmente realizada por su esposo, Sergio Massa, relacionada con el pago al club Boca Juniors por palcos que eran distribuidos en periodistas condecendientes con las políticas del gobierno anterior.

Galmarini señaló que una auditoría auditoría interna reveló que la administración de Mauricio Macri en la empresa había firmado con el club un acuerdo por 2 millones de pesos anuales en concepto de invitaciones para ver partidos en sectores vip de la Bombonera y participar de recorridas turísticas por el estadio. El acuerdo fue firmado en plena campaña electoral de 2019. “Al margen del valor monetario lo que me parece es que hay una falta de valor ético y moral”, señaló la funcionaria para destacar que se utilizó a la empresa como un botín de guerra. También destacó que eran dos los clubes con planteos similares, aunque finalmente se cerró el acuerdo con uno de ellos.