El gobierno nacional pretende tener a mediados de octubre el presupuesto 2019 aprobado. La celeridad está emparentada con la necesidad de mostrar resultados en las negociaciones que lleva adelante con el FMI, buscando ampliar en 20 mil millones de dólares el stand-by de 50 millones otorgado por la entidad un par de meses atrás.

Desde distintos frentes busca cerrar acuerdos para lograr una primera aprobación en la Cámara baja. El bloque del Frente Para la Victoria ya lanzó munición gruesa contra la propuesta que presentó Dujovne la semana pasada, con un ajuste que se cuantifica en el recorte de 400 mil millones de pesos, según planteó Agustín Rossi, el titular de la bancada. El rechazo al presupuesto también ha sido adelantado desde la izquierda y también de referentes del Frente Renovador, como es el caso de Felipe Sola, Daniel Arroyo y Pablo Moyano. El ex candidato a Presidente, Sergio Massa, está en una situación complicado. Un nuevo acuerdo con el gobierno partirá aún más su débil alianza con referentes de su sector que plantean un perfil opositor al modelo de gestión de Mauricio Macri.