Miles de personas comparten una extraordinaria movilización desplegando memoria, verdad y justicia recordando los años negros que transcurrieron en nuestro país a partir del 24 de marzo de 1976 bajo la dictadura cívico militar que ese día derrocaron al gobierno de María Estela Martínez de Perón, para iniciar una época signada por el asesinato, desaparición de personas junto a la pérdida de libertades individuales que aquel régimen impuso por la fuerza en toda Argentina.

La cobertura mediática de la movilización en esta icónica jornada está acotada a unos pocos medios mientras el gobierno dio a conocer videos cuestionando el número de 30 mil instalados como desaparecidos en esa etapa del país. Un planteo demasiado pobre, como si se tratara de números nada más y no de metodología utilizada por los dictadores tanto cívicos como de las Fuerzas Armadas de aquel entonces.

Entre las distintas marchas que se organizaron que confluyen hacia el centro de la Ciudad de Buenos Aires está también  la movilización que se está realizando, como en otros años, desde la exESMA hacia Plaza de Mayo por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.

Desde el escenario montado en Plaza de Mayo la titular de Abuelas, Estela de Carlotto, tras recordar que tiene 93 años pero no es una vieja, resaltó que “ante un Gobierno que nos ofende, el pueblo está más claro que nunca” . También planteó que la “participación de las fuerzas armadas en conflictos internos es contraria a su ley y pone en riesgo los derechos humanos”. Destacó que “los responsables civiles del terrorismo de Estado continúan impunes” y agregó “para ellos exigimos juicio y castigo ya”.

Por su parte el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel rechazó “el negacionismo y la apología al terrorismo de Estado” y pidió “la continuidad de las políticas y los espacios de memoria” También le pidió a los gobernadores que resistan el embate del gobierno y sigan el mandato que les dio el pueblo en las urnas.